El primer viaje al norte
Ya estaba prácticamente terminada. Quedaba solo el tema eléctrico, baterías, conversor, placa, etc. Pero como no sabía que cuanto necesitaba iba a descubrirlo durante el transcurso del viaje.
Tan solo nos llevamos un par de luces para alumbrarnos por la noche, una ducha a presión manual que tengo que es una maravilla. Tanto para ducharnos como para fregar. Ya que el fregadero estaba listo a falta del grifo con su bomba eléctrica. Y una neverita de esas de corcho que se rellena con hielo.
Además de todo esto cargamos todo el equipaje y nos dirigimos desde Isla Plana hacia San Sebastián.
Fue un viaje relámpago de una semanita ya que por motivos de trabajo no podíamos alargarlo mas. Pero que hubiéramos hecho de buena gana.
Vimos País Vasco y Cantabria. La verdad es que allí el verano es de otro color.
La furgoneta se comportó estupendamente. Tanto de motor como la habitabilidad, súper cómoda y práctica.
No pillamos muchas olas pero aprovechamos para hacer senderismo y disfrutamos de unos paisajes maravillosos.
Comentarios
Publicar un comentario